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miércoles, 25 de agosto de 2010

Situación geografica


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Viaje a ninguna parte.

H acía ya algún tiempo que me rondaba la cabeza crear un sitio dedicado a este pueblo, que vio nacer a mi madre, asturiana de sangre pero astur-leonesa de corazón.
  Irede de Luna es uno de esos pueblos en los que das la vuelta con tu coche cuando vas de ruta tras meterte por una carretera desconocida y estrecha y de la que sabes  intuitivamente antes de llegar a él, que no conduce mas que allí, que no hay salida, carretera  la cual no tiene siquiera un apartadero para dar la vuelta hasta que te encuentras en el pueblo. Sientes como te invade una sensación de que por alguna razón ese lugar te estaba empujando a conocerlo, y cuando llegas a él te das cuenta del por qué, has llegado a un sitio al que hay que dirigirse expresamente, porque de lo contrario, jamas terminarías allí. Miras a tu alrededor,  posiblemente no veas a nadie y des media vuelta sin siquiera pensar en las vidas de los pocos que allí habitan y menos aún en las de todos aquellos que lo levantaron y lo hicieron su hogar.

A salvo?

   E n la decada de los 40 del pasado siglo se comenzo a construir el cierre del pantano que hoy es conocido como el de Barrios de Luna, nombre que toma del pueblo que se situa justo debajo del propio cierre y que vio anegadas por las aguas, parte de sus casas, al igual que sucedió con pueblos enteros de la comarca, tales como Lancara, San Pedro, Lagüelles, Casasola y otros tantos. No fue hasta el año 1956 cuando se inauguró dicho embalse debido a la cantidad de retrasos que su construcción sufrió. Existe informacion sumamente detallada en paginas como http://www.miguelvalle.com/pantano_de_luna/estudio_berrueta/estudio_berrueta.htm#Obras%20pantano o la misma pagina de Barrios de Luna http://www.xente.mundo-r.com/luna/index.htm y creo que merece la pena echarles un vistazo aunque solo sea para darse una idea de lo que aquel valle fue y lo que el pantano se llevó por delante.  Por suerte Irede quedaba fuera del radio de acción de semejante mole y presumo que al igual que mis abuelos muchos de los que tomaron parte en su construcción escogieron durante los años que  duró la obra como lugar para vivir aquellos pueblos cercanos a su trabajo. Una vez finalizadas las obras, ¿cuantos se verían en la obligación de irse? y si los sumamos a los vecinos de los pueblos anegados, ¿que futuro habia allí? no creo que debamos darle muchas vueltas a la cabeza para entender el por qué de tantos solares con zarzales y tantas paredes derrumbadas. 

Piedra y paja.


N o recuerdo la edad exacta que tendría la primera vez que llegué a Irede, posiblemente hace mas de treinta años, lo que si sé, es que no recuerdo como eran los veranos antes de aquello. 
  Recuerdo vagamente una casa de piedra medio en ruinas con el tejado de paja y una sensación de "¿a donde me han traido mis padres a pasar el verano?". Era la casa en la que habian vivido mis abuelos durante un tiempo y que querian volver a levantar con ayuda de sus cuatro hijas. Fue entonces cuando comenzó todo, y todo, han sido los mejores momentos y veranos que pasé en mi vida exceptuando los que recibo a diario de mi familia, y aunque me resisto a pensar que nunca volveran, se que solo me estoy engañando a mi mismo. Esta sensación es una de las razones que me empujan a crear este blog con la esperanza de que todos aquellos que sienten nostalgia por aquello, lo ocupen por completo con todo... vivencias, recuerdos, sentimientos de entonces y de ahora, fotografias etc, todo lo que nos lleve de vuelta a aquellos años aunque solo sea a traves de la pantalla de un ordenador.

Lógica aplastante.

   A principios de los ochenta, muchos hijos del pueblo tomaron decisiones similares haciendo de este su lugar de veraneo. Coincidencia o no, se dio un periodo de tiempo en el que se concentraron allí un número suficiente de familias para que aquello tomara forma de comunidad, una comunidad que respiraba el mismo aire de bienestar que aquel sitio regalaba a todos y que generaba un estado de euforia por sentirse en el lugar y en el tiempo apropiados, algo que raramente ocurre. 
   Daba igual que aquel sitio no tuviese bar o tienda o piscina, siempre encontrabas algo o alguien con quien pasar el rato o hacer alguna trastada.  Eramos mucha juventud, solo en nuestra casa, nueve nietos, y eso en un pueblo tan pequeño significaba vida, anécdotas constantes, chiquilladas,  juegos, peleas,  discusiones, pero sobre todo, y estoy plenamente seguro de ello, un gran orgullo para los mayores que volvían a ver a su pueblo tomar nueva vida.
     Pero como todo en esta vida, nada es eterno y menos, aquel estado de bienestar, y no me refiero con esto a que llegadas ciertas fechas cada uno tuviese que volver a su realidad, sino al hecho de que la lógica es siempre aplastante y la vida lleva a cada uno por su camino.
  Un tipo de pueblo como Irede estuvo, está y estará abocado a encontrarse siempre al filo de la despoblación total, "a no ser que se encuentre petroleo" o surja una nueva generación de jovenes que le vuelvan a dar vida.

No tan aplastante.

  Si pensamos en el hecho de que los jóvenes buscan su hogar donde tienen su trabajo, también debemos pensar que algún día cuando llegue su jubilación tomen la decisión de volver al sitio en el que fueron felices.
  Este es un hecho que ya está teniendo lugar con la anterior generación, los que ya no tienen el yugo de vivir atados a un empleo y a una ciudad, y que han tomado ya esa decisión de estar donde realmente se sienten bien.


  De igual modo, esa forma de pensar puede llevar a nuestra generación a hacer lo mismo, aunque el vinculo con el pueblo cada vez se irá haciendo mas débil hasta el punto de encontrarnos en la misma situación; si yo no voy al pueblo, nada empuja a mis hijos a sentir nostalgia alguna por él. Aunque la impresión dando una vuelta por sus calles, es la de un impulso en la recuperación de viejas casas que de otro modo estarían destinadas a desmoronarse con el paso del tiempo.

La nueva escuela.

   A hí la tenéis, como nueva, con porche y todo y muestra inequívoca del deseo por mantener a Irede vivo. La escuela, la vieja escuela que fue parte tan importante de las fiestas y de la cual,  seguro que todos guardamos muchos recuerdos; el baile, las cenas, las chocolatadas o el baruco que se ponía junto al hueco de la escalera y que se llenaba justo después de acabar la misa (vasos de plástico, los arcones de las casas hasta arriba de cubitos de hielo, veinte duros pa ti veinte pa mi, un no parar). 
 En la cena de inauguración después de la reforma, los albañiles comentaban que en el interior todavía se encontraba el papel de aluminio forrando la columna de madera central y algunas cosas mas que daban fe en el 2009 de todo lo que nos parece tan lejano, pero con una escuela así; ¿No es una pena? al fin y al cabo ¿cuanto cuestan unos rollos de papel albal y unas bombillas?, HACE MAS EL QUE QUIERE QUE EL QUE PUEDE.

Silencio incompleto.

E s posible que si buscas calma creas que lo que necesitas es silencio,  pero incluso este tiene un molesto "sonido especial", el sonido de tus pensamientos, que no te abandonan incluso en ese supuesto estado de evasión,  pero... ¿quien ha dicho que la evasión se encuentre en el silencio?.  Si algo te mantiene lejos de conseguir la paz interior, no tiene por qué ser este el que te lleve a conseguirla. 
Sin embargo existe un tipo de silencio que puede lograrlo, uno  que con cierta licencia yo definiría como un "silencio incompleto" o un "estruendo sordo" por llamarlo de alguna manera, un silencio que en mi caso, escucho veo y en definitiva siento en cualquier tarde de verano con la temperatura y  humedad ideales que te proporciona la estratégica situación de un pueblo como este, cuando  decido tumbarme  y me limito a escuchar el casi imperceptible pasar del río,  sentir la brisa cálida y suave, al mismo tiempo que se abre paso entre los chopos regalándole esa misma suavidad a mis oídos, mientras observo como sus pequeñas hojas bailan frenéticamente.  Se que suena cursi, pero todos mis problemas se desvanecen y lo mas asombroso es la facilidad con que lo hacen, te evades de lo cotidiano y comprendes donde se hallan las fuentes de tus problemas, sintiéndote a salvo de ellos mientras ese "silencio incompleto" te acompañe.

Rincón especial.

  D e todo lo acontecido en aquel periodo de tiempo, guardo muchos recuerdos, pero solo unos pocos perduran con fuerza, mientras el resto aguarda en ese rincón especial de la mente, en el cual se encuentran esperando a que alguien  que ha vivido ese mismo momento contigo les vuelva  a hacer cobrar dicha fuerza. No hay duda de que ese tipo de recuerdos "abandonados",  provocan una  extraña sensación, mezcla de sorpresa alegría y nostalgia, sumamente gratificante en un momento así, similar a la que sientes cuando te muestran veinte años mas tarde,  una foto que no sabias que te habían hecho.
  No todos vivimos las mismas situaciones de igual modo y lo que a mi me ha marcado, para ti a podido ser una simple anécdota y viceversa. Este blog pretende eso... que compartamos nuestros recuerdos, dado que aunque algunos serán los mismos para todos estoy seguro que sería un experiencia sumamente enriquecedora y nos proporcionaría momentos de alegría que de otra manera serían irrecuperables.

Bigote blanco

  M etes un pack de seis litros en el carro y listo, así de fácil y soso resulta comprar la leche en tu tienda. Aquí era un poco diferente, recuerdo perfectamente que siempre íbamos a por ella al atardecer, ya casi de noche, cuando en agosto con sus días calurosos y atardeceres frescos era obligado coger cierto abrigo. Tarea habitual de la chiquillada, cuando unos cuando otros, no faltaba nunca quien quisiese tomar parte en algo tan cotidiano como ese menester.
  Como ya dije anteriormente, en Irede no había ni hay tiendas, la leche se compraba recién ordeñada por Luis, hijo de Tivo e Isabel,serio en su quehacer centrado en su trabajo y siempre con una sonrisa en la cara. Recuerdo ir a verlo ordeñar a la cuadra, con las yeguas, con el tractor, que paciencia tiene ese hombre, siempre dejándonos subir al tractor, cada vez que lo oíamos corríamos a subirnos para dar un pequeño viaje por la cara, ahora me imagino lo que le pasaría por la cabeza (Que pesados estos chavales, y si les pasa algo luego la culpa la tendré yo, se podían quedar en su casa!!), jejeje, y con razón Luis y con razón, con el tiempo me doy cuenta de que teníamos que resultarte muy pesados.

  La cuadra no estaba pegada a la vivienda, con lo cual había veces que llegábamos a la casa e Isabel o Tivo nos decían que Luis aun no había terminado de ordeñar. Nos quedábamos allí un rato hablando con ellos y observando los años grabados a fuego en cada rincón de aquella casa y de sus semblantes. Ya llegado Luis, Isabel cogía una jarra de plástico blanco perfectamente cilíndrica de un litro de capacidad, y con la laxitud de una persona que no ha conocido jamas el stress ni de palabra ni de hecho, comenzaba a contar los litros demandados por los que allí acudíamos. Recuerdo como si estuviese allí ahora mismo el olor a leche recién ordeñada, el sonido de la jarra llenándose y del embudo vaciándose, la espuma de "bigote blanco" y la penumbra del atardecer entrando por la galería, hacían de aquel momento algo sencillo y mágico que me llegaba a hipnotizar de tal manera que cuando volvíamos a casa yo iba con una sensación similar a la que produce un masaje relajante.

  Cuando Isabel hubiese terminado no solíamos salir por la misma puerta de la vivienda por la que entramos, lo hacíamos por el corredor que daba al corral y desde el cual veías el campanario de la iglesia, un corral sin asfalto, de piedra natural al que había que bajar por unas escaleras de madera de una muy aparente fragilidad pero desde luego de una robustez mas que probada. Atravesabas el corral hasta un portón de madera que daba a la entrada del pueblo, junto a la iglesia y la casa de Benedicta. Parecía haber pasado por un estado de trance, volvíamos a la voz mas alta, a la falta de respeto al silencio, y a pensar en lo rica que iba a estar esa leche a la mañana siguiente.

Tunnel of hate!!!

  D e vez en cuando, un lugar asi puede hacerte sentir cierta "claustrofobia", debido al aislamiento en que se asienta, pero hasta para eso tenía el pueblo valvula de escape.
   Vamos a tomar un helado a Los Barrios?.... Venga. 3,5 kilometros tenían la culpa, que es eso? eso no es nada, en un momento dando un paseo, te plantabas abajo y veias caras nuevas, salias un poco de la rutina, si tienes en cuenta que de aquella no teníamos coche, era lo mas parecido a cogerlo para ir a tomar algo. Te tomabas el helado en el bar de Pepe y Mari o en el de Amada, te pillabas unas pipas de facundo o la praviana y carretera de vuelta a casa.
  No habia garita, pero existia una frontera entre ambos pueblos perfectamente delimitada por..... EL TUNEL!!!!, si el tunel por encima del cual pasaba la autopista y que si se estudian las pintadas y comentarios allí plasmados dentro de unos miles de años, esa gente va a flipar en colores con la cantidad de improperios, insultos, piropos y demás que se pueden leer incluso a unas alturas a las cuales solo se puede haber llegado subiendose al techo de una furgoneta, tractor, camión o similar. Todos ellos bien surtidos por parte de ambos pueblos, que si este es..., que si el otro parece..., que si los de Barrios son..., los de Irede mas etc.
  Volvias al pueblo y nada mas llegar respirabas ese ambiente familiar y de humildad y sabias que estabas en el bando de los buenos, jajajaja, menudas tonterías digo, aunque el tunel reflejase algo parecido a la discordia, la realidad era bien distinta y el respeto nunca se echó en falta, al menos eso me pareció a mi.

La piedra de Benedicta

  S i hay algo que sé que nunca voy a olvidar, esos son los ratos que tenemos pasado en "La piedra de Benedicta", tanto de día como de noche aquel era un punto de encuentro a partir del cual surgían todo tipo de ideas o simplemente se pasaban las horas allí hablando. A primera vista no parece un buen plan, sin embargo aquel lugar que gozaba de sombra durante buena parte del día y resguardo por la noche dado que se encontraba bajo el abrigo de una galería, tenía algo que invitaba a no moverse de allí, tal vez porque todo el que  llegase o se fuese tenía que pasar obligatoriamente por delante, pues la casa está situada la primera a la derecha en la entrada del pueblo, y la novedad en un  lugar tan pequeño estaba en quien llegaba o se iba. Si te cansabas de estar allí sentado subías al campanario donde en tardes calurosas se agradecía la brisa, y de paso hacías lo inevitable, tocar las campanas con la uña o con una piedrita para observar con que poca cosa, esta producía un ruido audible en gran parte del pueblo.

   Después de cenar volvíamos al punto de encuentro y si había suerte y alguno de los de mas edad estaba por la labor, de repente, una queimada o una chocolatada para pasar lo que quedaba de día calentitos al fresquillo de la montaña leonesa en agosto. A veces nos poníamos a caminar carretera abajo, los días de luna llena la claridad era increíble, te permitía moverte sin sentirte abrumado por la noche.
   Con que facilidad se hace a uno feliz cuando es un niño, si eso ocurriera ahora, no despertaría curiosidad alguna, sería algo anecdótico, pero a una determinada edad hay cosas que con que te hagan sentir bien son suficientes para arreglarte el día, el problema está en que lo que entonces te hizo feliz hoy posiblemente te aburra (la falta de novedad), ahora es difícil que algo  te entusiasme como entonces, ¡que tesoro la infancia!.

La tele naranja.

  D urante el tiempo en que se llevó a cabo la construcción de la casa (la de los asturianos), la estancia en el pueblo se hizo en tiendas de campaña en la propia finca, duchas de manguera, letrinas, en fin todas las comodidades de un camping. No tengo un recuerdo claro de aquello, era muy pequeño, pero algo sí se me quedó grabado,  un pequeño televisor de antena de cuernos que si la memoria no me engaña era naranja vivo, que quieres... eran los 80, y en el que recuerdo estar viendo la serie "Galáctica" dentro de una de las tiendas de campaña, después de todo alguna tienda hubo en el pueblo, aunque no vendíamos gran cosa.
   Años mas tarde ya con la casa en pie, no sé la razón pero quedábamos unos cuantos para ver otra serie mítica, "El coche fantástico",la veo ahora y me da la risa, aunque entonces  me entusiasmara. No quedabamos allí, sino en la casa de los vecinos de al lado, Javi y Fernando  en  la trébede de la cocina, de las pocas que deben quedar en el pueblo, otras en cambio quedabamos  en casa de Mundo y Amparo con Alberto, Mónica y Fernando, para después de la sobremesa salir al calor de la tarde con la sensación de tener todo el tiempo del mundo para no hacer nada hasta que el día tocase a su fin.

Por qué me gusta Irede?

P odría decir que es el pueblo que vio nacer a mi madre aquel día de diciembre en el que la nieve sobrepasaba las ventanas, y que además me he imaginado su vida en él por aquel entonces un montón de veces, o que es el lugar donde he pasado momentos maravillosos de mi infancia y que indiscutiblemente han marcado mi personalidad nostálgica y dependiente siempre de lo retro, la música, el cine, el estilo de vida de aquellos últimos 70 y primeros 80 son mi devoción, rozo por ello el "frikismo" soy consciente de ello, incluso podría hacer referencia a su clima perfecto para pasar el verano, o a sus gentes amables y austeras, su paisaje precámbrico, incluso su aislamiento, pero nada de eso define con exactitud por qué me gusta Irede.
  
 Me gusta por lo que es y mas aún por lo que nunca a llegado a ser, porque es pura sencillez y no necesitó mas que eso para enamorar al que a él se acercaba, porque no necesitó nunca de artificios para meterse dentro de nuestros corazones, porque al igual que un perro que no necesita mas que estar junto a su amo para que este le tenga cariño, Irede no muestra mas al que lo vive, que su propio alma impreso en cada piedra y en cada rincón, y sin decir nada lo dice todo, sin llamarte, tu acudes, y esa sensación de atracción mágica que surge por algo tan simple y aparentemente falto de atractivo como es un pueblo al borde de la despoblación, es lo que me fascina. ¿Que tiene un sitio que no posee nada del otro mundo, para que la gente sienta esa añoranza por él?; yo creo que su historia desconocida para muchos de nosotros, irrecuperable por mas que se quiera y la decadencia en la que se encuentra hoy, te hacen sentir que has llegado tarde, que no has podido estar allí para no dejar que eso pasase, que iluso!, y eso por lo menos en mi caso me llena de cierta rabia por llamarlo de algún modo, y sobre todo de mucha pena, pena por un lugar que se va desmoronando y al igual que el perro que no expresa su mal mas que con  una actitud  lánguida, este se limita a verse morir sin poder expresar su dolor. Parece mentira pero en un caso así , la pena, la nostalgia y la rabia, se entrelazan para dar como resultado una querencia especial por el pueblo, será simplemente que no quiero verlo llegar a su fin. Por eso me gusta Irede.

La Fiesta

  E s obvio que solo he tocado de refilón un tema que desde luego estoy seguro que si no para todos, para la gran mayoría "fue" sin duda el que ha dejado en nuestros recuerdos una huella mas profunda, me refiero por supuesto a la fiesta del pueblo.
  Se celebraba el 15 de Agosto, y hasta no hace mucho yo no sabía que la celebración de Santa Catalina debía tener lugar el 25 de Noviembre, desconozco la razón por la cual se hacía esto aunque presumo que fuese debido a que por esas fechas del verano la afluencia de gente a los festejos sería mucho mayor, noviembre en Irede no debe tener un clima muy adecuado para ponerse a comer una caldereta de cordero en una era. El caso es que la celebración consistía en una misa con su procesión, una comida con todo el pueblo en reunión, y baile por las noches; podía haber juegos como los bolos, gincanas etc.
  Desde que conozco las celebraciones estas cambiaron de lugar un par de veces, la primera comida que recuerdo se hacia en la era que había detrás de la cuadra de Luis en el barrio de arriba y por aquel entonces el baile tenía lugar en "La cortechada", baile currao, tenía de todo, premios, baile de disfraces etc. Algo que me quedó grabado es el hecho de tintar las bombillas para la pista (de aquella me parece a mi que una bombilla de color debía costar un ojo de la cara), y sobre todo el día que me disfracé de D'artagnan y en el primer salto que pegué en la era de nuestra casa antes de subir al baile conseguí rajar el pantalón desde el culo hasta la bragueta, con lo cual parecía un pingüino caminando, menos mal que nunca he sido de bailar, hay muchas tías y primas que pueden dar fe de ello.
  Años mas tarde la comida pasó a tener lugar en la era de los asturianos y el baile en la escuela, son recuerdos mas claros para mi, recuerdo los voladores, exclusividad de Marcial, las mozas con la santa, las dificultades del pendón para pasar por debajo de los cables de la luz, la muchachada escuchando la misa en la zona destinada al coro, la colocación de los banderines, jugándonos el tipo, el cartel de bienvenidos a Irede hecho con sabanas (creo por lo menos lo parecían), la elección de reina de Irede y las damas de honor, el vermouth después de la misa, la caja de vinilos con el plato y el amplificador y tantas cosas mas.
  De primero empanada de bonito o de chorizo, de segundo caldereta de cordero, platos de plástico, vino con casera, y por supuesto LA GUERRA DEL PAN, había uno.... Fernando el de Mundo también apodado CARIÑOSAMENTE "el eléctrico", que era un experto en comenzar guerras de este tipo, menudo elemento estabas hecho Fer.
  Después el café y la rifa, vaya rifa, no se rifaba un viaje al Caribe ni un apartamento en Benidorm, igual caía un jamón o unas camisetas o algo similar, pero las bobadas que hacía entre medias el padre del que escribe, mientras daba vueltas al bombo del bingo de juguete, a veces me ruborizaban y otras me daban risa, pero trataba de esconderme como diciendo, que no sepan que es mi padre, de lo cual me arrepiento y de que manera, si fuera hoy, me hubiese unido a él para ser a cual mas ridículo y hacer la fiesta y la diversión mayor aún, después de todo era lo que pretendía, y alguna vez lo logró.
  La prueba de que siempre había algo que hacer es que existen fotos de esas celebraciones donde después del café los únicos que quedaban allí eran los adultos mientras la chavalería se esfumaba, no siempre, he de recalcar.
  El caso es que aquello se acabó, no hay fiesta, bum!!!, se esfumó, circunstancias de la vida, es una pagina de la historia del pueblo que ya pasó, y una de las razones por las cuales a veces yo tenga la sensación de que este se encuentra en decadencia. Tal vez no sea una decadencia en toda su expresión, el hecho es que el pueblo retoma cierto brillo al reconstruirse casas que estaban abandonadas y ver que hijos de Irede se niegan a abandonarlo aunque sus trabajos se encuentren lejos, pero si una decadencia en el sentido mas etéreo, en el que envuelve el hecho de que aquella unión y diversión no tiene lugar hoy en día. Llegaron a reunirse para comer ciento y pico personas en un pueblo que censa hoy quince habitantes y en el año 1986 cuatro, eso da una idea de lo que se ha perdido, espero eso si que TEMPORALMENTE. Mi pregunta es.... ¿quien tomará ahora el timón dejado por otros?¿No es mas que un derecho o privilegio, UN DEBER?.

Bendita nostalgia.

  E s curioso lo poco que nos damos cuenta del paso del tiempo en nuestras carnes hasta que observamos fotos de hace años en las cuales no existe lugar para el autoengaño.
  Esa percepción de la realidad se hace mas latente cuando las comparaciones entre ayer y hoy las realizamos sobre otras personas; como ha cambiado fulanito o que joven estaba ahí menganito son comentarios habituales que nos hacen despertar a la realidad mas severa, la que implica la temporalidad de nuestra existencia. El tiempo da cuenta de su paso y arrolla cualquier tipo de esperanza que se base en la infinita permanencia de algo o alguien en este mundo, generando una sensación de ansiedad por vivir con fuerza lo que aun nos queda, pero siempre con la resignación de no poder recuperar tantos y tantos momentos perdidos. No sé que nombre tendrá esa sensación, mezcla de tristeza por lo perdido y felicidad por seguir aquí para poder robarle a la vida momentos que nos hagan merecedores de su paso por ella.

  Moraleja: moraleja? es que existe una moraleja? habría que ser muy tonto para no sacar tus propias conclusiones, que cada uno haga de su vida lo que crea mas conveniente, pero lo que si es seguro es que aunque sepamos lo que la vida es y en que acaba, no siempre lo tenemos presente y por tanto no damos a cada minuto la importancia que tiene, porque de ser así, ¿vivirias tu vida igual que lo haces ahora?, no ¿verdad?, ¿vivirias tu vida de igual modo sabiendo que tienes los días contados?, pues contados están, los tuyos y los mios, y aunque suene cruel esa es la realidad que nos empuja a considerar los buenos momentos como algo preciado, de no ser así terminaríamos por no guardar ni uno solo de ellos  y la vida se tornaría en algo banal e insoportable a largo plazo.
  La nostalgia habla así, de una forma que en principio puede parecer pesimista y que sin embargo lo que pretende es despertar el optimismo por el mero hecho de seguir ahí para poder sentirla, creo que eso es bueno, no existiría un sentimiento como este de no existir esa temporalidad y a veces me gusta sentirme así, sobre todo cuando recuerdo lo que en el pueblo viví. Regocijarse en el pasado implica cierto grado de tristeza pero desde luego las compensaciones son mayores, ¿por qué razón iba la gente a guardar cosas, a tomarse su tiempo en plasmar un instante o en grabar en video un acontecimiento?.
   Tal vez el que lea esto no opine lo mismo, (lo pasado pasado está y lo único que me importa es el futuro). De acuerdo, pero la base del futuro es el pasado y si no se mira atrás, corres el riesgo de brindarle a ese tu futuro una base defectuosa que lo ira haciendo ceder, pobre en rectificaciones y rico en deformaciones cada vez mayores.
 Aunque esa no es la causa por la que yo miro atrás, a mi simplemente me encanta recordar tiempos pasados; oye! cada uno es dueño y señor de sus anhelos y los mios pasan por poder volver a sentir la vida con aquellas ganas y despertarme algún día creyendo que va a ser diferente del anterior.

Irede a por tabaco.

  B uscar información acerca de Irede en la red es como tratar de preguntarle al marido que se fue a por tabaco, que día va a volver a casa. No es posible encontrar nada digno de mención, y no es de extrañar, estamos hablando de un pueblucho perdido en las montañas en el que nunca pasa nada y que no ha repercutido en la historia reciente ni antigua, o por lo menos en la reciente, vete tu a saber a cuento de que se asentaron allí los primeros habitantes, de cuando data la creación del pueblo, de donde viene ese nombre, que tiene su miga, IREDE, que uno no sabe si es una expresión del castellano antiguo "he de ir" o que demonios significa. Por mas que he buscado no he encontrado mas que insignificantes reseñas en revistas de geología hablando del tema de la famosa discordancia angular, pleitos de hidalguía de 1600 y 1700, los cuales serían de gran valor a la hora de realizar un árbol genealógico, y pocos datos mas.
  Tal vez hacer saber que fue considerado como un barrio de Barrios de Luna y que según el documento que se puede ampliar, reflejado en este post, en 1950 tenia mas edificaciones no destinadas a vivienda que los propios Barrios, no sé a que puede referirse (Iglesia, escuela etc). Quiero recordar haber oído a alguna de mis tías hablar de algo de tipo manufacturero en la parte baja del pueblo tras pasar el pilón, donde se encuentran una cantidad de ruinas considerables, aunque desconozco que pudo ser. 88 habitantes por aquel entonces, es un número nada despreciable, pero pensar que en 1986 aparecen censadas 8 personas, quita el hipo. 

   Otra de las cosas que aparece mucho en la red es el hallazgo de un hacha de la edad de bronce, pero no he conseguido saber mas del tema, ni fotos ni lugar del hallazgo, nada.
  Algo que me gustaría saber de verdad, es de cuando data el pueblo, sé que es practicamente imposible conseguir resultado alguno mediante la red, que se le va a hacer, por lo menos sabemos que en 1600 ya estaba allí, gracias a los pleitos de hidalguía, con lo cual hay poco donde rascar sentado en casa delante del ordenador.
   Saber cual fue su época de mayor apogeo es otra de las cosas que me encantaría conocer, cuando tuvo lugar y por qué, la pena es que como ya he dicho, no juega un papel relevante en la historia y por lo tanto no capta la atención de nadie.
  En la foto, antepasados de mi abuelo Misael, cuyo padre era descendiente de Irede, no sabría decir quien son, pero desde luego la foto tiene su miga, además la peculiaridad del fondo rocoso parece descubrir timidamente que la foto fue tomada por aquellos lares. No sé fechas ni nombres pero me parece un documento interesante poder conocer caras de los que nos precedieron en el pueblo.

Octubre rojo.

  Y a llegó el otoño, y con él los ocres, los rojos y los chopos con la hoja amarilla y verde tan solo en lo alto de sus copas, el frío, las chimeneas echando humo sin parar y los leñeros llenos hasta arriba.

  No es que sea mi estación preferida, pero tiene su encanto, la gama de colores es una gozada, cada rincón, cada árbol invita a plasmarlo en un cuadro o una fotografía como si te estuviese diciendo "aprovecha ahora que dentro de poco me voy a quedar desnudo", el pueblo muestra otra cara muy distinta y encuentras su atractivo en el calor de la cocina, el olor a leña quemada, el café bien caliente y el paseo vespertino entre las hojas que ya se van desprendiendo, cubriendo los caminos con una alfombra mullida, aunque la presencia de un invierno que esta probado como crudo casi con seguridad en estas latitudes a la vuelta de la esquina, genera cierto grado de tristeza por la larga espera que se avecina hasta que las temperaturas inviten a la vida fuera de casa. Es a partir de ahora cuando los mas valientes son los que mantienen el pueblo vivo, de no ser por ellos estaríamos hablando de un pueblo fantasma en esta época del año.

Vaya marrón.

A yer 27 de octubre de 2010 he vuelto al pueblo a pasar la tarde y me he encontrado con que la población ha aumentado, aunque estemos hablando de la población canina.
   Lola y Sol han sido papas y el notición ha servido para que alguna pequeñaja se lo haya pasado como los indios jugando con los cachorrinos un buen rato, yo he contado cuatro, de los cuales hay uno marrón que es una pasada, al parecer la gente se los rifa y no es de extrañar, ni siquiera tienen nombre pero están de un gordo que no hay mas que ver las fotos, se ve que Luismi los alimenta a conciencia. 
 


  Yo me traería uno si no fuese por la falta de espacio en este minipiso, otra de las cosas que se echa de menos del campo, luego se hacen mayores y a ver donde los metes, es una pena porque no creo que exista juguete en el mercado que le pueda hacer pasar un rato como el que pasó la canija de la casa ayer con estos cuatro.





Campanas curiosas.

  H asta ayer no me había fijado, pero me pareció curioso algo que vi reflejado en las campanas de la iglesia. En la mayor de  ellas aparece como santa Sta. Barbara, dado que la santa del pueblo es Catalina creí que podría tratarse de la campana de otra iglesia que fue a parar a esta tras la guerra e incluso pensé en un posible error a la hora de grabar la campana, pero cual sería mi sorpresa cuando buscando un poco por la red observo que la similitud entre ambas santas es abrumadora, hasta tal punto que en muchos retablos aparecen juntas y representadas ambas por la palma y la espada, ambas fueron decapitadas aunque por razones diferentes pero por alguna razón que no llego a entender ambas santas se encuentran en estrecha relación también en la iglesia del pueblo. Existe información detallada en esta pagina Santa Barbara y Santa Catalina de Alejandría. .

  Otra curiosidad a la que no encuentro explicación es la diferencia considerable en la fecha de fabricación de ambas campanas, dado que la mas pequeña data de 1826 mientras la mas grande de 1867. ¿es que una de las campanas fue reemplazada, un hueco del campanario esperó 41 años por su campana, el campanario sufrió modificaciones?. Según datos de ritos y costumbres en la zona de Babia y Luna, antiguamente se enterraban los muertos bajo la iglesia (bajo el altar he creído entender), también recuerdo haber oído que el cementerio se encontraba pegado a la iglesia por la parte de atrás, yo he visto con mis propios ojos siendo un niño una especie de sótano bajo el altar con imagenes y cuando digo imagenes hablo de representaciones en madera, de santos medio quemados, supongo que por la guerra, vamos que la iglesia ha pasado lo suyo y solo Dios y posiblemente algún viejo del lugar tenga la respuesta a mis preguntas pero yo de momento me quedo sin ellas.



09/01/2011 Algún día...

  T engo la sensación de estar viviendo una broma pesada, un concentrado de malestar  y ansia de liberación que no me permite estar en paz, y es que estas fechas sacan lo peor que hay en mi.  No llevo bien ser la rama en la corriente, no me gusta sentirme tan insignificante, tan dependiente de lo que quieran ofrecerme y sobre todo tan falto de acercar mi realidad a mis apetencias. 
  Y es que salir a la calle hoy es tomar parte en un ritual de anulación de uno como ser único para convertirse en una pieza mas de una masa gris que lo invade todo con un gesto anodino y vírico y que acaba por convertirte en una especie de autómata que hace lo que el resto hace como si de una atracción de masas se tratase.
  Atascos, aglomeraciones, gente por todos lados ocupándolo todo sin respetar espacios ni falta que se tiene ya que todos están a lo mismo y el problema no es el donde, si no el cuando, todos a la vez que el día antes de... , es el mejor para todo.
  O es que este puñetero mundo ha perdido el norte por completo o al contrario, me erijo como una persona antisocial que busca estar lejos de todo aquello que me hace sentir tan pequeño. Echo de menos poder estar a solas con el mundo; es de todos, que duda cabe, pero yo quiero mi parte de él y no quiero compartirlo con todos, solo con aquellos que quiero que se encuentren dentro de él, ardua tarea en una urbe la cual no hace mas que obligar a mi cabeza a buscar la quietud de mi mundo donde sé que la encontraría sin duda, lejos de aquí en un lugar donde lo importante no es conseguir  la mejor cena, el mejor regalo, la mejor fiesta el mejor coche o la mejor ropa, tan solo lo que te pide tu alma y no esa jodida masa gris que no hace mas que alimentarse de la autenticidad que cada uno guarda en su interior.
  
  Bueno, aunque después de semejante alarde de frustración parece poco apropiado, solo espero de todo corazón  que tod@s encontréis en este nuevo año, esa felicidad tan ansiada donde quiera que estéis, o donde quiera que soñéis estar ;).

En tus ojos.

H acía mucho tiempo que algo no me producía tal sensación de plenitud como el hecho de ver a mi hija corriendo y saltando por el pueblo, sabiendo que es feliz, tan feliz como lo era yo cuando tenía su edad.
 Siempre que decido ir a pasar unos días, mi mayor temor es que ella se aburra, que lo que para mi significa desconectar de todo, para ella suponga un sacrificio debido a la merma sufrida entre la juventud en estos años.   
 Pero como es costumbre en mi, vuelvo a equivocarme, y es que aunque son pocos saben buscarse unos a otros como si tuviesen un sentido especialmente diseñado para ello. Ya el año pasado refrescó un poco con Juanin, su amiguin del alma, y este año mas de lo mismo, esto me empieza a mosquear, el muy pillín me la quería llevar de playa unos días, pues no va rápido ni nada el elemento. También han pasado buenos ratos juntos con Esther, Noa e Ivan jugando a fútbol, pero no me extraña que les gane Ivan por goleada  "abusón, que tu estás entrenao y bien entrenao".
  He llegado a sorprenderme de lo fácil que le ha sido cambiar la ciudad por el campo o de las perretas que se ha pillado al decirle que faltaba poco para volver a casa, y me he dado cuenta de que el caldo de cultivo que generó las vivencias y sentimientos tan fuertes que me ha dejado el pueblo, sigue ahí,  "INTACTO", es mas fuerte que una dos o tres décadas, incapaces estas de acabar con lo que aun no sé que es, pero que proporciona lo mas buscado por todos.
 Hace tiempo me hice la pregunta de por qué me gustaba el pueblo, y la verdad, la respuesta no me convenció entonces ni lo hace ahora, me niego a pensar que lo que pueda sentir por el pueblo sea lástima, tal vez la distancia me hiciese hablar así, pero ahora recién dejado atrás me doy cuenta de que es algo mucho mas grande, pero sigo sin saber que es, y creo que mientras esto sea así, nunca dejará de gustarme. Lo único que sé seguro es que puedo ver ese mismo sentimiento en los ojos de una mas, y eso me basta.

Hace muchos muchos años en un reino lejos del mar...

 ...Habitaban hombres y mujeres que no tenían el ocio como su principal objetivo; trabajo y mas trabajo para subsistir es lo que deja ver esta foto y otras tantas como esta. Una joya de fotografía de esas que cuando la consigues sabes que tienes un trozo de historia entre las manos, guardada en una caja de galletas de metal durante decadas y que le ha dado al que escribe un subidón en el momento en que su dueña se la mostró acompañada de un breve apunte que le da mas fuerza aún si cabe. 
  Al parecer está tomada en un lugar que sería reconocible solo por unos pocos debido al cambio que ha sufrido. Si nos ponemos a buscar el lugar en cuestion en nuestra cabeza no lo vamos a encontrar, de ahí la importancia del apunte dado por su propietaria. Esta tomada delante de lo que hoy por hoy es la cuadra de Luis, la que se encuentra anexa a la casa de Pepe y Ana y como se puede observar, esta no existía o se encontraba mucho mas desplazada hacia atrás. Los protagonistas son Manolo y su padre Natalio a la izquierda.

Playstation.... que es eso?.

  C asi me atrevería a no decir nada, no creo que nada de lo que pueda escribir dé mas lustre a estas fotos del que ya poseen. Estoy plenamente convencido de que  muchos esbozaréis una sonrisa incluso una carcajada a la vez que se os acelere un poquito el corazón cuando caigáis en la cuenta de que esto estaba en vuestra cabeza, en ese rincón especial del que ya he hablado en otra ocasión, en el cual reposan acontecimientos como este. 


  Ni me acordaba si os soy sincero, hasta que comencé a verme entre la chiquillada y me convencí de que si, de que tenía un vago recuerdo de aquello, que en verdad ocurrió, me pillaba muy pequeño pero a algunos de vosotros no, seguro que recodáis algo de aquel día que sería muy de agradecer que estuviese acompañando aquí a estas estampas. Una buena entrada para llenar de comentarios, creo que no pido mucho....